La intoxicación por plomo es un problema de salud pública que a traído consecuencias, a miles de personas en todo el mundo. En esta entrada de blog, te proporcionaremos información detallada sobre las fuentes, efectos, síntomas, tratamiento y prevención de la intoxicación por plomo, 

Es un metal pesado que se encuentra en una variedad de fuentes, como el agua contaminada, fundición primaria y secundaria de metales, baterías, gasolina, pigmentos para pinturas y barnices, proyectiles y municiones, soldadura, pintura, industria automovilística, como insecticida, para la fabricación de vidrios  cerámica, y la tierra contaminada. La exposición al plomo puede ocurrir a través de la ingestión, la inhalación o el contacto dérmico con materiales que contienen plomo.

Los niveles al­tos de exposición pueden afectar la síntesis de hemoglobina, la fun­ción renal, el tracto gastrointestinal, las articulaciones y el sistema nervioso. La intoxicación aguda se acompaña de alteraciones digestivas, dolores epigástricos y abdominales, vómitos, alteraciones renales y hepáticas, convulsión y coma. En tanto, la intoxicación crónica puede implicar neuropatías, debilidad y dolor muscular, fatiga, cefalea, alteraciones del comportamiento y renales, aminoaciduria, glucosuria, nefritis crónica, encefalopatía, irritabilidad, temblor, alucinaciones con pérdida de memoria, cólicos y alteraciones hepáticas, entre otros.

Consumo de bebidas y alimentos contaminados e inhalación de vapores de plomo presentes en la atmósfera.

En el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares, es importante realizar cambios en el estilo de vida, como dejar de fumar. La intoxicación con metales puede ser difícil de detectar al principio, ya que los síntomas suelen aparecer cuando se acumulan grandes cantidades. Los niños menores de seis años son los más vulnerables a la intoxicación, lo que puede afectar de forma grave su desarrollo físico y mental. Es crucial prestar atención a estos factores para prevenir complicaciones.

Los síntomas de la intoxicación por plomo pueden variar en función del nivel de exposición, la edad y el estado de salud de la persona afectada. Algunos síntomas comunes incluyen dolor abdominal, estreñimiento, dolores musculares y articulares, pérdida de memoria, problemas de sueño, cambios en el estado de ánimo, dificultades de aprendizaje, pérdida de peso y de apetito, fatiga, retraso en el desarrollo, vómitos, pérdida auditiva, convulsiones o irritabilidad, hipertensión arterial,  dificultad de concentración, y dolor de cabeza.

El tratamiento de la intoxicación por plomo suele implicar la eliminación de la fuente de exposición y la administración de quelantes, que son medicamentos que ayudan a eliminar el plomo del cuerpo. Es importante buscar atención médica inmediata si se sospecha de intoxicación por plomo para evitar complicaciones a largo plazo.

Para protegerse de la intoxicación por plomo, es importante seguir algunas medidas simples y efectivas:

1. Lavar las manos y los juguetes regularmente para evitar la ingestión de polvo o tierra contaminada.
2. Limpiar las superficies con polvo y usar una mopa húmeda en el suelo y muebles para eliminar cualquier residuo de plomo.
3. Quitarse el calzado antes de entrar a casa para evitar traer tierra contaminada con plomo.
4. Dejar correr agua fría durante un minuto si las tuberías contienen plomo y evitar usar agua caliente para cocinar o preparar alimentos.
5. Evitar que los niños jueguen con tierra y proporcionarles un arenero cubierto o sembrar césped.
6. Seguir una alimentación saludable rica en calcio, vitamina C y hierro para reducir la absorción de plomo.
7. Mantener la casa en buen estado, arreglar la pintura con plomo y evitar lijar para evitar la generación de partículas de polvo contaminadas.