Si deseas mejorar tu salud y bienestar de manera natural, el té puede ser la solución perfecta. Esta antigua bebida se ha consumido durante siglos gracias a sus propiedades medicinales. Además de ser reconfortante, el té en sus distintas presentaciones (como el té verde, el té negro y el té herbal) ofrece una variedad de beneficios para promover tanto la salud física como mental. Algunos de estos beneficios incluyen un aumento de energía, así como propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

El Té Verde es considerado uno de los tés más saludables debido a su abundancia en antioxidantes, su capacidad para estimular el metabolismo, quemar grasa, aumentar la energía y mejorar la función cerebral.

Por otro lado, el Té Negro se caracteriza por su sabor fuerte y su contenido de cafeína más alto. Este té es conocido por sus propiedades estimulantes y se ha demostrado que mejora la salud del corazón, reduce el colesterol y disminuye el riesgo de enfermedades crónicas.

En cambio, el Té Blanco se destaca por su sabor suave y delicado. Contiene una alta concentración de antioxidantes y se ha comprobado que fortalece el sistema inmunológico, mejora la salud oral y combate los signos del envejecimiento.

Los tés de hierbas, a diferencia de los tés tradicionales, no contienen cafeína y se elaboran con una variedad de plantas como manzanilla, menta y camomila. Estos tés son conocidos por sus efectos calmantes, digestivos y relajantes.

El Té de Rooibos, originario de Sudáfrica, es naturalmente libre de cafeína y rico en antioxidantes. Se ha demostrado que este té mejora la digestión, la salud de la piel y el sistema inmunológico.

Cada tipo de té tiene sus propias características y beneficios para la salud. Incorporar una variedad de tés en tu dieta diaria puede proporcionar una gran cantidad de beneficios para mantener un estilo de vida saludable.

Para la preparación de un te tenemos que tener en cuanta varios aspectos  fundamentales ,  La temperatura del agua juega un papel fundamental en la preparación del té, ya que varía según el tipo y calidad del té utilizado. Es importante evitar que el agua llegue a hervir, ya que esto provocaría una pérdida de oxígeno perjudicial para el sabor de la infusión.

Otro aspecto clave a considerar es el tiempo de infusión, ya que un tiempo prolongado puede dar lugar a un sabor amargo y la pérdida de nutrientes. Para aprovechar al máximo los beneficios del té, es recomendable seguir las indicaciones específicas de tiempo y temperatura para cada tipo en particular. De esta manera, lograremos una preparación adecuada y conservaremos todas sus propiedades.

Pero el gran olvidado en esta ecuación es el agua , es necesaria un agua de calidad , preferiblemente, un agua débil, de baja mineralización para que pueda adsorbe y potenciar todas las ventajas de un buen te , y que este libre de químicos y metales pesados, lo más ecológico seria tener un sistema de osmosis del grupo Aqualai.     

Siguiendo estas recomendaciones, podrás garantizar una óptima preparación de tu té y disfrutar al máximo de todos sus beneficios.