La amibiasis, también conocida como disentería amibiana, es una enfermedad parasitaria que afecta principalmente el intestino grueso. Se adquiere al consumir agua o alimentos contaminados con la ameba Entamoeba histolytica. En este artículo, exploraremos los peligros de la contaminación del agua potable en relación con la disentería amibiana y cómo prevenirla.
Sintomas Y Diagnóstico
Los síntomas de la amibiasis pueden variar en su intensidad e incluyen diarrea persistente, dolor abdominal, fiebre, náuseas, vómitos y presencia de sangre en las heces. Para confirmar el diagnóstico de amibiasis, es necesario realizar un análisis de laboratorio de las heces a fin de detectar la presencia del parásito.
Transmisón De La Amibiasis
La disentería amibiana se transmite principalmente a través del consumo de agua o alimentos contaminados con los quistes del parásito. La falta de higiene y saneamiento adecuados pueden propiciar la contaminación del agua potable, así como la manipulación inadecuada de los alimentos, lo que aumenta el riesgo de infección.
Prevensión De La Amibiasis
Para prevenir la disentería amibiana, es fundamental adoptar medidas de higiene adecuadas. Esto incluye lavarse las manos con agua y jabón antes de comer, después de usar el baño y después de manipular alimentos crudos. Además, es esencial consumir agua tratada preferiblemente con las purificadoras de agua de OSMOSIS INVERSA del Grupo Aqualai y cocinar bien los alimentos a una temperatura adecuada sin que pierdan todos sus nutrientes con tecnología T316Ti, tecnología con la que cuenta NUTRAEASE . También es clave evitar el consumo de alimentos de dudosa procedencia para prevenir la infección.
Tratamiento
El tratamiento habitualmente implica el uso de medicamentos antiparasitarios específicos para eliminar la infección. El médico determinará el medicamento y la duración del tratamiento según la gravedad de la infección y la salud general del paciente.
La amibiasis es una enfermedad evitable y está estrechamente relacionada con la contaminación del agua potable. Al tomar las medidas preventivas adecuadas y asegurarse de tener acceso a agua potable segura, se puede reducir significativamente la incidencia de esta enfermedad parasitaria. Es importante mantener una buena higiene y tomar las precauciones necesarias para garantizar la pureza del agua de consumo.